Desde el pasado jueves detonó una nueva controversia en redes sociales, donde usuarios de Twitter tacharon de clasista a Sandra de la Vega—esposa del centrocampista mexicano— por subir una fotografía en la que aparece Luciana, la niñera de sus hijos, estando en Qatar.
A partir de ese momento no ha parado la discusión entorno a la pareja y a la cuidadora de niños que se encuentran en el Mundial, pues Luciana está en aquel país como parte de su trabajo.
Luciana Ramírez o también conocida como “Ushi” se volvió tendencia de inmediato ya que la gente calificó de clasista que la llevaran a Qatar y saliera en las fotos familiares, aunque realmente se trata de todo lo contrario.
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Luciana Ramírez es originaria de Hidalgo y lleva trabajando para esta familia desde hace dos años; gracias a su trabajo como niñera ha podido viajar a distintas partes del mundo.
La sobreinterpretación en redes sociales
De acuerdo con lo relatado por la pareja y por la misma Luciana, ella es considerada como una integrante más de la familia, además de resaltar que siempre la han tratado con mucho respeto.
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La originaria de Candelaria Huejutla está orgullosa de su trabajo para ayudar al cuidado de los niños, y ante la incesante oleada de críticas, Sandra de la Vega siguió publicando fotografías de su estancia en Qatar “con y sin Ushi”.
¿Es clasista llevar a una trabajadora al Mundial?
La Real Academia Española define al clasismo como una “actitud o tendencia de quien defiende las diferencias de clase y la discriminación por ese motivo”.
El caso de Luciana no es un hecho clasista, sin embargo, demostró que las diferencias entre las clases sociales están muy acentuadas y polarizadas en México.