Las extorsiones que se registran en nuestro país y que provoca afectaciones que van desde la escasez de pollo en Chilpancingo, hasta el encarecimiento del aguacate o el limón en Michoacán, forman parte de los delitos que en la presente administración no ceden y que al contrario, han alcanzado niveles históricos, lo que afecta principalmente el bolsillo de los pequeños empresarios, productores y la población en general.
De acuerdo con el reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en los primeros cinco meses de este año sumaron 4 mil 673 víctimas de dicho delito, lo que significa un aumento de 28,8% en comparación con el mismo periodo de 2021, siendo abril el mes que alcanzó el máximo histórico con mil 142 casos.
Cabe recordar que en los pasados gobiernos, el delito también era recurrente; sin embargo, en la presente administración morenista, las extorsiones han crecido 33.2 por ciento y 68.4 por ciento en comparación con los gobiernos de Felipe Calderón, cuando se registraron 18 mil 60 investigaciones, mientras que con Enrique Peña Nieto fueron 22 mil 832 indagatorias, en tanto, en lo que va del gobierno del presidente López Obrador, la cifra alcanza las 30 mil 426 investigaciones por extorsión.
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El estudio realizado por el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, reveló recientemente que el delito de extorsión eleva los costos de la canasta básica alimentaria e impacta negativamente en la inflación, hasta en dos puntos porcentuales.