Elegir los zapatos correctos es un punto clave para mantener un buen estado de salud en los pies, los cuales, aunque no lo creas, son de las partes del cuerpo más importantes, pues mantienen todo tu peso. Es por eso que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) compartió una serie de recomendaciones.
Entre los diferentes tipos de calzado podemos encontrar aquellos “de calle” y para “el hogar".
¿Cuáles son los mejores zapatos según la ocasión?
Nuestros pies poseen 26 huesos divididos en tres zonas principales: el pie delantero, el medio y el trasero, según explica la Profeco.
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En el caso del delantero se encuentran también cinco metatarsos y 14 falanges, los cuales forman un puente entre el medio y los dedos.
Para evitar problemas en esa zona, debes escoger el calzado adecuado para cada situación. A continuación, unas sugerencias.
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Zapatos de calle
- Asegúrate que proteja tus pies del suelo y que tengan una temperatura correcta.
- Se debe adecuar a la forma del pie para no caer en deformidades.
- Evita los que tengan costuras molestas.
- Revisa que tengan buen agarre para no derrapar ni caer.
Calzado para el hogar
- La sujeción trasera es fundamental y debe cubrir la zona del empeine.
- De preferencia, tiene que contar con un forro interior.
- Evita el uso de chanclas debido a que son las principales generadoras de caídas, esguinces y traumatismos.
¿Qué problemas pueden ocurrir en los pies, según Profeco?
De no seguir las recomendaciones anteriores, puedes contraer algunos de los padecimientos o problemas que se presentan enseguida.
- Espolones calcáneos: se refiere a cuando el hueso del talón crece.
- Pie de atleta: suele ser contagioso y producirse por andar en zonas húmedas. Se caracteriza también por grietas en los pies.
- Callos: se ubican en la parte superior del pie, específicamente en los dedos, como crecimientos amarillos.
- Juanetes: los podrás observar como una protuberancia del hueso o del tejido cercano a una articulación.
- Neuroma de Morton: se trata de la acumulación del tejido benigno en los nervios ubicados entre los huesos largos del pie.
- Dedo en martillo: el dedo se suele encorvar, esto sucede por usar calzado ajustado.
- Fractura del pie: como te dijimos, hay al menos 26 huesos en los pies, por lo que es muy fácil que alguno se rompa en caso de un mal zapato.
- Fascitis plantar: es un dolor severo en el talón, también genera inflamación.
- Pie diabético: tal cual lo dice su nombre, lo padecen aquellos con diabetes, por lo que es fundamental tener un calzado adecuado.
Evita estos problemas al elegir los zapatos correctos para cada ocasión con estas recomendaciones por parte de la Profeco. Ten presente que la comodidad está por encima del estilo.