En un pequeño ring circular de 75 centímetros, dos aguerridos oponentes se empujan entre sí durante la final de la categoría de MiniSumo, dentro del torneo de MiniRobótica (MR13).
Entre gritos y aplausos en la explanada de la Universidad del Valle de México (UVM) campus Coyoacán, los creadores de los robots se dan la mano y luego un juez toca el silbato para que los artefactos de 10 centímetros con 500 gramos de peso traten de arrojar fuera del ring a su contrincante.
Tres días, cerca de 10 encuentros y los últimos tres rounds dieron por ganador al robot 3D autónomo de Luis Ángel Sánchez Panadero, estudiante de Mecatrónica de la UVM campus Puebla.
“Lo que aquí cuenta mucho son los sensores que tiene y la programación. Este robot cuenta con una memoria interna que es la que hace que nunca pierda a su rival por sensores de movimiento”, explicó a Notimex.
El alumno confesó que el diseño del robot le llevó más de dos meses y que tras ganar el torneo, él y su equipo buscarán acercarse a competencias internacionales. “Estamos pensando irnos a Japón que es donde empezó el origen de este concurso y donde están los mejores del mundo”, externó.
A su vez, el profesor de Ingenierías de Campus Tlalpan, Raúl de la Cruz Ibarra, comentó que la relevancia de estos eventos fortalece las habilidades de los estudiantes en especial de las ramas de mecánica y mecatrónica.
“El estudiante no sólo desarrolla los conocimientos de programación, de mecánica, sino qué hay un plus extra que es el competir porque tienen que resolver los problemas en situaciones de segundos”, finalizó.