Nada demuestra más que hay amor puro que el estar dispuesto a arriesgar la vida por salvar a quien amamos; así lo demostró esta abuelita superheroína que salvó a su perro de las fauces de un cocodrilo.
Los hechos ocurrieron en Florida, Estados Unidos, durante lo que parecía ser una tarde tranquila en el parque.
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Suzan Marciano, de 74 años, se divertía con Nalu, un perrito golden retriever, a la orilla de un lago.
El cachorro corría y jugaba con un palo, hasta que se metió a nadar al agua; todo parecía ser muy normal, hasta que Suzan vio una sombra gigante que salía desde el fondo del lago y se acercaba a Nalu.
Se trataba de un cocodrilo de más de 1.80 metros de largo que estaba dispuesto a devorarse al perrito.
¿Cómo se convirtió en una abuelita superheroína para salvar a su mascota?
Este martes 21 de septiembre, el diario The Palm Beach Post contó la historia de Suzan Marciano y Nalu, la cual ocurrió a finales de agosto en el parque Burt Aaronson, en el oeste de Boca Ratón, Florida.
La mujer contó que cuando se dio cuenta que esa misteriosa sombra era un temible cocodrilo, su corazón se detuvo por unos instantes.
Sin embargo, el miedo lo transformó en valentía y decidió hacer lo que estuviera en sus manos para salvar a su fiel acompañante.
“Me arrojé sobre el caimán con todo mi peso”, aseguró Suzan, la abuelita superheroína.
Cuando la mujer le cayó encima al cocodrilo, éste soltó al perro, pero intentó atacar a la salvadora.
Luego de un rápido movimiento, la Suzan logró escapar con su perro en brazos y el cocodrilo volvió a la parte más profunda del lago.
“La Providencia debía estar conmigo”, dijo aliviada la mujer sobre su hazaña.
¿El perrito sobrevivió?
El cocodrilo tenía en sus fauces al Golden retriever, por lo que le provocó graves lesiones.
Sin embargo, luego de una cirugía, Nalu logró sobrevivir y actualmente se encuentra totalmente recuperado.
Por su parte, la mujer sufrió una herida en la mano a causa del ataque del cocodrilo, pero con unas cuantas puntadas logró sanar.
La abuelita superheroína contó que ella y Nalu vivieron varios días con miedo de salir a la calle, pero poco a poco recuperan la confianza de volver a jugar en el parque.
Con información de EFE.