MEJOR CON GABY VARGAS

Los sorprendentes helechos

Son plantas vasculares, de hojas frondosas que crecen a manera de una espiral que va desenrollándose hasta alcanzar su forma definitiva

Helechos / Ilustración
Helechos / IlustraciónCréditos: Pixabay
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03 Feb 23 - Los sorprendentes helechos

Tal vez hayas escuchado hablar del doctor Oliver Sacks, un destacado neurólogo inglés que escribió libros interesantes y amenos, y que cobró fama cuando uno de ellos fue llevado a la pantalla, protagonizado por Robin Williams y Robert de Niro, con el nombre de “Despertares”.

Pues te cuento que, ese personaje generoso que trabajó para mejorar la vida de sus pacientes y para sensibilizar a los demás sobre los retos de los trastornos neurológicos, fue también un hombre de múltiples inquietudes culturales y científicas.

Se interesaba por la Química, la Geografía, la Mineralogía, el Arte, la Literatura y, por supuesto, la Biología. Dentro de esta última rama del conocimiento le inquietó especialmente la Botánica y, de manera muy particular, una especie de plantas tan comunes como sorprendentes: los helechos, a los que se aficionó por un vínculo emocional muy fuerte y un recuerdo imborrable de su infancia.

Contaba Sacks que, en los primeros años de su vida, el jardín de su casa estaba sembrado con incontables helechos y que su madre y su tía le hablaban a menudo de las sorprendentes características de estas plantas.

Son una forma de vida simple con una belleza particular, le decían. Es una especie que ha sobrevivido sin cambios por más de 300 millones de años y que al mirarla alegra el espíritu, a pesar de que no tiene ni flores ni frutos.

El pequeño escuchaba asombrado esas explicaciones y se recostaba en el césped bajo las frondosas hojas de los helechos de su jardín. Pero llegó la guerra, la Segunda Guerra Mundial. Londres vivió carencias y bombardeos y las prioridades cambiaron.

La madre de Oliver Sacks decidió convertir su jardín en huerto para apoyar las urgencias de alimentación del vecindario y todos los helechos fueron arrancados.

El jardín de helechos quedó para el niño como el recuerdo de una suerte de paraíso perdido y por eso, cuando fue un adulto, se interesó en el estudio de estas maravillas botánicas.

Pero, ¿por qué te digo que son unas maravillas? Porque, efectivamente, se trata de una de las especies vegetales más antiguas del planeta.

Para decirlo pronto: los helechos convivieron con los dinosaurios, pero ellos sí lograron sobrevivir. Por eso hay quienes los definen como “Fósiles Vivientes”.

Son plantas vasculares, de hojas frondosas que crecen a manera de una espiral que va desenrollándose hasta alcanzar su forma definitiva. Se reproducen por medio de esporas, a diferencia de la mayor parte de las plantas que lo hacen a través de semillas.

Hay numerosísimas especies de helechos y México cuenta con muchas de ellas, sobre todo en los estados de Veracruz, Chiapas y Oaxaca. Se han convertido en una planta de ornato muy popular porque es muy lucidora y puede ser cultivada en interiores. Su aporte de oxígeno es alto, con lo que ayuda a la purificación de los ambientes.

El Feng-Shui los considera como un símbolo de armonía, prosperidad y buena suerte y regalarlos es un mensaje de solidaridad y buenos deseos.

Te invito a que disfrutes de la belleza y los beneficios de esta planta incomparable que ha sido testigo de la historia de nuestro planeta.

Y te dejo con unos versos que les dedicó la poeta chilena Gabriela Mistral:

“Duerman los helechos altos,

callados como un secreto.

Sigan latiendo dormidos,

así, callando y latiendo…”

Helechos / Ilustración / Pixabay