Audio relacionado
El Día Mundial del pensamiento Scout se celebra el 22 de febrero. En esta fecha nacieron Lord Robert Baden-Powell, fundador del movimiento Scout y su esposa, Lady Olave, jefe guía mundial. Todos los años diferentes personas conmemoran este día con reflexiones y pensamientos sobre qué es ser Scout. Se acompaña de un hashtag: #DíaMundialdelPensamientoScout.
¿Cómo comenzó todo? En 1907 se llevó a cabo un campamento experimental en la isla Brownsea en Dorset Inglaterra donde participaron 20 jóvenes. Tuvo gran éxito y probó a Baden-Powell que su entrenamiento y método eran atractivos para los jóvenes.
Un año después se publicó la primera edición de Escultismo para muchachos, el cual fue un éxito. En este, Robert proveía de un método de entrenamiento para niños y jóvenes para organizaciones ya existentes. Para su sorpresa, los jóvenes se empezaron a organizar en lo que se convirtió en el movimiento voluntario más grande del mundo. ¿Te imaginas?
El movimiento Scout comenzó entonces como un programa para niños de 11 a 18 años de edad, pero prácticamente desde ese momento se creó la sección de Lobatos para niños menores.
Actualmente, los Scouts se han involucrado en temas como salud infantil, casas a bajo costo, alfabetización, producción de comida y hasta capacitación técnica. Hoy representa un arma contra la drogadicción, una integración para personas con discapacidad, un elemento educativo contra el deterioro del ambiente y una herramienta de educación para la paz. Así, se mantiene como fuente de inspiración para que los jóvenes sean ciudadanos activos desde la comunidad hasta la creación de un mundo mejor.
¿Qué significa ser Scout? Ser integrante de este movimiento es cumplir con una serie de leyes o reglamentos que se promueven en este tipo de agrupaciones. Hoy te comparto los 10 valores que todo scout debe cultivar.
El primero es ser digno de confianza, pero no solo dentro del grupo sino en cualquier lugar del mundo donde estés y frente a cualquier persona. Otro precepto es ser leal, contigo mismo, con la naturaleza, con la familia, amigos y comunidad.
Todo scout deberá ser útil y servicial, es parte de su esencia: prestar servicio al mundo y generar, a través de ello, cambios positivos en el entorno. Donde quiera que haya un scout, habrá un amigo de todos, un hermano scout con quien contar. Es vital también ser cortés, educado y tratar siempre a los demás con cortesía y respeto. Amar y proteger la naturaleza son parte de los principios de todo scout, así como también ser responsable y llevar sus compromisos hasta el final.
Los scouts deben mantener el buen ánimo a pesar del peligro o de las contrariedades, así como procurar contagiar esperanza a su alrededor. Un scout es trabajador, se gana sus cosas y no tomará los bienes ajenos sin permiso. Evitará malos pensamientos o realizar acciones contra otros.
Ser scout, o mejor aún pertenecer a una asociación scout es tener una educación no formal que se integra a la formal e impulsa a la formación del carácter en la niñez y la juventud mundial. Hoy, de acuerdo con sus propias cifras oficiales, son 30 millones de scouts en 190 países del mundo que poco a poco han cambiado la vida de 500 millones de personas. Sin duda alguna, debe ser parte de una estrategia importante en el que la juventud se ha movilizado de alguna forma en este tipo de grupos con estrategias y valores trascendentes.