BENEFICIOS DEL CAFÉ VERDE

Beneficios del café verde

La diferencia principal entre el café tradicional y el verde es el tratamiento que reciben: el tradicional se calienta y se tuesta; el verde se deja tal cual se recoge, va de la planta a su preparación como bebida

Café verde / Ilustración
Café verde / IlustraciónCréditos: Foto de Rachel Clark en Unsplash
Escrito en PODCAST el

Audio relacionado

Su navegador no soporta la reproducción de audio por HTML 5
19 Jul 22 - Beneficios del café verde

El consumo de café tradicional en América Latina es impresionante. Actualmente se habla de un nuevo tipo de café, el café verde. Hoy te comparto algunos de sus beneficios.

La diferencia principal entre el café tradicional y el verde es el tratamiento que reciben: el tradicional se calienta y se tuesta; el verde se deja tal cual se recoge, va de la planta a su preparación como bebida.

Este simple proceso potencia los efectos positivos del café verde. Se trata de un café que presenta un aroma menos intenso y un sabor algo más amargo que el café negro tostado.

Los principales componentes del café son la cafeína y el ácido clorogénico. Cuando se hace el proceso de tostado, el efecto de la cafeína aumenta y el del ácido clorogénico disminuye. Si dejas natural el grano del café, esto no ocurre.

El ácido clorogénico es un potente antioxidante, considerado ideal para las personas que presentan hipertensión y problemas cardiacos. Gracias a su contenido en polifenoles, ayuda a combatir el envejecimiento y a reducir los efectos negativos de la acción de los radicales libres.

La ingestión de café verde fortalece cada célula y reduce las posibilidades de padecer estrés. De acuerdo con recientes estudios, realizados en Estados Unidos, se reveló que el consumo de café verde incrementa las posibilidades de bajar de peso. Por eso, las personas con obesidad, deberían agregar café verde al diez por ciento de su dieta diaria, además de llevar, claro, una alimentación equilibrada y una rutina de ejercicio moderado.

Este efecto reductor de peso se debe a un efecto termogénico, es decir, el café verde incrementa la temperatura del cuerpo –justo como lo hace el jengibre – y el proceso metabólico empieza a acelerar el quemador de grasa. Lo anterior provoca que las reservas de grasa que se adhieren al cuerpo se conviertan en energía. Funciona también como digestivo.

Se trata de una bebida ideal para la dieta de personas con diabetes tipo 2, ya que ayuda en la regulación de los niveles de azúcar en la sangre.

El café verde tiende a mejorar la fisonomía de la piel, provoca saciedad; es decir, beber una taza de café verde ayuda a mantener el apetito disminuido.

El café verde tiene la capacidad de reducir la presión arterial; la dosis recomendada para que su efecto se produzca es de media taza al día. Asimismo, este café aumenta la actividad cerebral, como consecuencia, incrementa la concentración y la memoria.

El café verde combate la artritis y la reuma, dolencias que por lo general afectan a personas de edad avanzada y generan inflamación, dolor y enrojecimiento.

La ingestión de café verde evita también la formación de cálculos renales y biliares, así como también estimula la necesidad de realizar actividad física. Su consumo puede combatir el dolor de la migraña.

No se recomienda su consumo en: niños pequeños, embarazadas, personas con problemas de riñón y quienes sigan una dieta baja en hidratos de carbono (ya que reduce la absorción de azúcar de los carbohidratos). Tampoco se recomienda para personas con diabetes que reciben insulina o toman medicamentos, pues el consumo regular de este tipo de café puede disminuir los niveles de glucosa en sangre. 

Como todo alimento, no debe ingerirse en exceso, ya que de esta forma puede generar problemas de insomnio, taquicardia y hasta reflujo gástrico.

Taza de café / Ilustración / Pixabay