ABUSO EMOCIONAL

Gaslighting

Este tipo de manipulación es sutil, pero peligrosa, ya que lleva a continuar relaciones tóxicas, desarrollar inseguridad y dependencia a las personas.

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Pareja / IlustraciónCréditos: Foto de Afif Kusuma en Unsplash
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18 MAYO - GASLIGHTING MANIPULACION EMOCIONAL

¿Alguna vez has escuchado el término gaslighting? Es un patrón de abuso emocional en que la víctima es manipulada a tal grado que llega a dudar de sí misma, de su juicio o memoria, lo cual redunda en ansiedad, confusión y hasta depresión.

Frases como: “tú estás loca”, “eso nunca pasó”, “tienes una memoria terrible…”, “ya se te olvidó” son ejemplos comunes de gaslighting que te ayudan a reconocer y tratar esta forma de abuso emocional.

El término, traducido al español como luz de gas, tiene su origen en la película Gaslight de 1944, basada en la obra de teatro homónima de Patrick Hamilton. El tema de esta cinta es precisamente ese, una pareja de recién casados que se van a vivir a casa de una tía que ha fallecido. La esposa comienza a escuchar algunos ruidos que la atemorizan y su esposo comienza a presionarla de tal forma que logra hacerle creer que se volvió loca, que perdió la razón y así planea robar su fortuna escondida. La recién casada no quiere salir de casa, está sumamente sensible y el esposo casi consigue su cometido si no es por un investigador que al final descifra la situación y desenmascara al marido. 

No solo está película ha representado este fenómeno, más recientemente la serie española “Parot” también aborda este fenómeno en su trama.

Este tipo de manipulación es sutil, pero peligrosa, ya que lleva a continuar relaciones tóxicas, desarrollar inseguridad y dependencia a las personas.

Los principales efectos del gaslighting a mediano y largo plazo son que la víctima duda de su propia capacidad para recordar y su raciocinio; que la víctima puede asumir que tiene un trastorno psicológico y por ende, una baja autoestima e inseguridad.

De cualquier forma, gaslighting es una táctica de control que deja a la víctima en una niebla, una realidad alterada que deja al gaslighter o manipulador con todo el poder de la relación. Hoy te quiero compartir algunas de las principales técnicas para poder detener este tipo de abuso emocional.

Primero que nada, reconoce las señales de advertencia. El gaslighting, por su naturaleza, no ocurre de un día para otro, sino que suele llevar varios años de desarrollo, así que conviene estar atento al hecho de que la otra persona intente, en varias ocasiones, poner a todos en tu contra, te mienta repetidamente, te critique por estar mal, loco o sensible o simplemente te haga dudar de tu juicio.

Luego, es importante aprender a escuchar a la intuición, confiar en tus sentimientos y capacidades, en esa vocecita que nos dice, desde la sabiduría del corazón, que sí o que no y, sobre todo, apoyarte en los demás a medida que te sientas atraído por ese tipo de manipulación, ya que serán las demás personas las que te ayudarán a ver lo real.

Resiste la tentación de convencer al otro para tener su aprobación y recuerda que las emociones no son ni buenas ni malas y nadie, absolutamente nadie, puede decir si lo que sientes es o no válido. Si puedes evitar sentirte molesto, hazlo y busca la ayuda de un especialista en salud mental que te ayude a superarlo.

El gaslighting, como todo abuso emocional, no es una broma, ya que erosiona diferentes facetas de salud mental y a menudo deja a la persona con trastorno de ansiedad y depresión, por eso es importante estar atento a sus señales y saber establecer límites para refugiarte en tu lugar seguro, donde te sientes tranquila y en paz.

Pareja / Ilustración / Pixabay