OPINIÓN LUIGI DURÁN

'Canciones Para Llorar Bailando': Una noche felizte

Los Rumberos presentan su sexto álbum de estudio, “Canciones para llorar bailando”. Un compilado de 15 canciones.

Los Rumberos reclutan al percusionista Tony Succar para inyectar de sabor dos salsas.
Los Rumberos reclutan al percusionista Tony Succar para inyectar de sabor dos salsas.Créditos: IG @losrumberos
Escrito en OPINIÓN el

Los sentimientos nunca llegan solos, nuestros pechos son fiestas de emociones, donde a veces los pies se entrelazan, caen con lágrimas o vuelan de euforia. Un adiós permite recordar bellos momentos y deja esperanza por un reencuentro; un baile, aunque sea el último, nos regala felicidad eterna para recordar. “Un baile pa’ sanar” una cortadita en el corazón, y una sonrisa para disfrutar la tristeza.

Los Rumberos presentan su sexto álbum de estudio, “Canciones para llorar bailando”. Un compilado de 15 canciones, donde el dúo mexicano, conformado por Paul Sefchovich y Lito de la Isla, nos regalan un momento “felizte”, en el que la felicidad y la tristeza bailan el son de la vida.

Como dice Paul, los sentimientos brotan en parejas y hay que bailar con ellos sin distinción; ambos músicos juegan con esta dualidad a lo largo del disco. Por ejemplo, en “No Me Acostumbro”, junto a los colombianos de Monsieur Periné, relatan la lucha interna de una persona feliz de por fin disfrutar su soledad y espacio, pero profundamente triste por el vacío de su cama. La añoranza de los abrazos y besos, aún con sus defectos, a lo mejor son más intensos que la comodidad.

De la misma forma, en “Tú Escríbeme”, muestran el sentimiento agridulce de seguir en contacto con una persona especial, amigo o expareja, que, aún en la distancia, sus mensajes se sienten como besos en el alma. Es una nostalgia presente; con un texto, el tiempo separados desaparece, y una sonrisa a la pantalla ilumina los rincones polvorientos de la memoria. Aunque no te vea, una parte de ti vive en un cuartito del corazón.

Paul y Lito se unen a Reyli Barba y SanJuan para la rumba de “Compañera”. Los cuatro se rinden ante la mujer de sus momentos más dolorosos y felices; se entregan a la hoguera del amor. “Hay cosas en la vida que no entiendes pero te enamoran”, le cantan a la tierra, a la luna, al pasado y al futuro que los espera, con un baile que te reduce a cenizas.

Los Rumberos reclutan al percusionista Tony Succar para inyectar de sabor dos salsas. Primero, en “No Son Horas”, Paul y Lito bailan hasta la madrugada, justo cuando las malas ideas acechan la cabeza. Tú sabes, cuando te preguntas si está despierta, si sigue pensando en ti, si a lo mejor vuelve a funcionar, si a lo mejor con el próximo trago te animas a llamarla. Al final seguro no pasará nada, pero la idea mejora la fiesta y diluye las lágrimas con pasos de baile.

Al final, una nueva oportunidad se abre entre las parejas de miedos y entusiasmo sobre la pista del salón. En “Si Te Animas”, Paul, Lito y Tony invitan a arriesgarte, a sacarla a bailar, quizá sea tu siguiente corazón roto o la compañera de vida que buscabas… sólo hay una forma de saberlo: da el primer paso. Siente cada momento y disfruta cada emoción como venga: triste, feliz, “felizte”. Todas son bienvenidas, todas se bailan con gozo en el son de la vida.