Esto es apartheid: el informe de Amnistía Internacional sobre el régimen de Israel contra los palestinos

Para beneficiar a la población israelí judía, Israel impone dominación a la población palestina tanto en el mismo país como en los Territorios Palestinos Ocupados. .

Esto es un poco de lo que habla Amnistía Internacional sobre sobre el régimen de Israel contra los palestinos/ fotos: Pixabay
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El 1\u00b0 de febrero Amnistía Internacional publicó un reporte titulado "El apartheid israelí contra la población palestina" en el cual muestra que Israel impone un sistema de opresión y dominación a la población palestina tanto en Israel como en los Territorios Palestinos Ocupados con el fin de beneficiar a un grupo: la población israelí judía. En la nota de hoy, resumo este informe y explico qué es el apartheid.

Hace apenas dos semanas, en mi columna semanal escribí: "Un día el mundo tendrá que reconocer que oponerse a las políticas sionistas no es ser antisemita y que [\u2026], las autoridades israelíes están cometiendo los crímenes contra la humanidad de apartheid y persecución contra los palestinos". Esto ya lo había señalado Human Rights Watch en 2021 pero ahora, en 2022, Amnistía Internacional, la organización con más reconocimiento en el mundo que trabaja por los derechos humanos, también señala a Israel como un país que comete el crimen de lesa humanidad de apartheid.

El apartheid israelí contra la población palestina.

Fuente: Amnistía Internacional, 2022

Antes de avanzar con el contenido de este informe, hay que explicar concretamente qué es el apartheid y cómo es que afecta a los palestinos. Apartheid es una palabra de origen afrikáans, una lengua germánica que se habla principalmente en los países de Sudáfrica y Namibia, que literalmente significa "separación". El término se refería originalmente a un sistema de segregación racial (étnica) que implantó la minoría blanca contra la población negra en Sudáfrica, sin embargo, su definición nos muestra que hoy en día existe el apartheid en otras partes del mundo.

De acuerdo con la Convención Internacional sobre la Represión y el Castigo del crimen de Apartheid que entró en vigor en 1976, dice que el apartheid se trata de una violación al derecho internacional público y constituye un crimen de lesa humanidad. Consiste en la aplicación de políticas y prácticas de segregación y discriminación étnica, así como en el incurrimiento de actos inhumanos que se cometen con el fin de instituir y mantener la dominación de un grupo étnico sobre otro con el fin de oprimirlo sistemáticamente. Existen tres tratados importantes que prohíben y/o penalizan de manera explícita este sistema: la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial, el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (Estatuto de Roma) y la ya mencionada Convención Internacional sobre la Represión y el Castigo del Crimen de Apartheid (Convención contra el Apartheid).

En su artículo II, la Convención contra el Apartheid explica que dentro de estas prácticas está el asesinato de miembros de uno o más grupos raciales y, resulta que el año 2021, fue el más letal desde 2014 con 319 palestinos asesinados por israelíes (313 por las fuerzas de seguridad israelí y el resto por colonos y civiles). También incluye dentro de aquellas prácticas de apartheid la detención arbitraria y la prisión ilegal de los miembros de uno o más grupos raciales, aún así, a enero de 2022 había 4,600 presos políticos palestinos en cárceles israelíes (incluidos 500 retenidos sin haber sido señalados por un crimen o tener un juicio) y lo mismo sucede para todas las otras prácticas de segregación y discriminación racial que señala la Convención: para cada una, Israel lleva a cabo algún acto inhumano y violento para mantener el control y la dominación sobre la población palestina.

En Sudáfrica el apartheid se vivió entre los años de 1948 y 1994, curiosamente, el apartheid israelí comenzó el mismo año (incluso antes), pero es hasta el 2021 y 2022 que las organizaciones internacionales de derechos humanos más importantes lo señalan abiertamente de esta manera. La población palestina desde hace décadas reclama que se le llame al régimen de Israel por su nombre y que sea reconocido como tal en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Pero, como bien dice Amnistía Internacional, "el apartheid no es aceptable en ninguna parte del mundo. Entonces ¿por qué el mundo lo acepta contra la población palestina?".

La casa de un colono judío en la ciudad palestina ocupada de Hebrón tenía un letrero en el que se lee
La casa de un colono judío en la ciudad palestina ocupada de Hebrón tenía un letrero en el que se lee "Los árabes están prohibidos, esta es la calle del Apartheid"./ Fotos: Jeziret Gallardo, 2012

Como menciona el informe de Amnistía Internacional, y como personalmente he señalado en otros artículos y en mi reciente investigación de maestría, aquí entran en juego las alianzas que Israel tiene en occidente, (aunque el informe no lo dice explícitamente se sabe que EE. UU. es el principal aliado y financiador militar), quienes se han negado a hacer algo al respecto y permiten que Israel cometa crímenes contra la humanidad, haga uso indebido de la legislación antiterrorista para señalar a organizaciones civiles que trabajan por los derechos humanos e incluso llevar a cabo campañas de desprestigio contra todos quienes alzan la voz, ya sean individuos u organizaciones señalándoles de "antisemitas" (es decir, un acto de odio contra los judíos).

El informe también explica que Israel lleva a cabo de forma institucionalizada y sistémica las prácticas de segregación mediante leyes, políticas y prácticas para impedir que la población palestina, incluidos los millones de refugiados, reclamen los mismos derechos que la población israelí judía. Esto quiere decir que las instituciones gubernamentales, las autoridades militares y la administración civil israelí son partícipes en la aplicación del sistema de apartheid.

Las políticas se extienden de formas diversas para afectar todos los aspectos de las vidas de las personas palestinas: en planes de urbanismo, en sentencias judiciales, en los sistemas carreteros que se basan en el color de las placas para permitir o impedir el uso de ciertas vías en los Territorios Palestinos Ocupados, por mencionar solo algunos.

En 2012, en la ciudad palestina ocupada de Hebrón, de un lado de la calle caminaban los colonos judíos y del otro los palestinos locales./Fuente: Jeziret Gallardo, 2012
En 2012, en la ciudad palestina ocupada de Hebrón, de un lado de la calle caminaban los colonos judíos y del otro los palestinos locales./Fuente: Jeziret Gallardo, 2012

El reporte también habla sobre el uso del régimen militar para controlar y desposeer, es decir, que Israel, mediante este régimen, busca promover el establecimiento de población judía sobre territorio palestino, principalmente en zonas estratégicas que le permitan mantener el control de tierras agrícolas, recursos hídricos y de otros tipos. Igualmente se menciona la negación a la nacionalidad, la residencia y la vida familiar, la desposesión de las tierras y propiedades entre varios temas más.

En Palestina se construyen asentamientos ilegales a los cuales Israel transfiere a su población /Fuente: Jeziret Gallardo, 2012
En Palestina se construyen asentamientos ilegales a los cuales Israel transfiere a su población /Fuente: Jeziret Gallardo, 2012

Con todo ello, Amnistía Internacional concluye que "el Estado de Israel considera a la población palestina un grupo racial no judío inferior y la trata en consecuencia" y hace una serie de recomendaciones a Israel, a la Autoridad Palestina; al Consejo de Derechos Humanos, al Consejo de Seguridad y a la Asamblea General de la ONU; a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional, a otros gobiernos (el informe de Human Rights Watch si hace un llamado directo a EE. UU. y el de Amnistía Internacional no), al sector empresarial y, finalmente, a las organizaciones humanitarias y de desarrollo nacionales e internacionales para que actúen y se ponga fin a este sistema opresor violento.

La publicación de estos informes es un gran avance en la lucha contra el apartheid israelí, sin embargo, el problema es más complejo debido a que precisamente gobiernos, empresas y un complejo entramado de organizaciones alrededor del mundo son el soporte de esta estructura. El tiempo que esto dure dependerá de la presión que se siga haciendo para dejar de normalizar las relaciones con un Estado que día a día lleva a cabo crímenes contra la humanidad.

¡Viva Palestina Libre!

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