El 2022 ha sido un año del establecimiento de la “nueva normalidad” en nuestras vidas; con todos los retos que aún representa la pandemia de covid 19 en el mundo (porque se niega a irse del todo y la propia OMS no ha decretado terminada da la emergencia sanitaria), la humanidad ha tenido que volver a sus actividades y diversiones como ha podido sorteando los riesgos de contagio.
En Reino Unido y Europa la gente simplemente ya ha disminuido hasta la más mínima expresión las medidas de prevención de infección, incluso en el transporte público (trenes, subterráneo y camiones) es casi ausente el uso de cubrebocas a pesar de que el invierno ha avanzado en el hemisferio norte.
En Estados Unidos, no es diferente, los conciertos, shows, festivales y espectáculos masivos en lugares cerrados y al aire libre han regresado sin restricciones y nadie usa cubrebocas; lo cual quiere decir, que si vas a un concierto es posible que algún contagiado de covid también y pueda provocar una cadena de contagios multitudinaria, pero la diferencia es que ahora, nadie tiene miedo y parece no importarles.
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Ante este escenario, la mejor parte de este año ha sido que nuestras bandas, músicos y artistas favoritos pudieron regresar a sus giras, cumplir compromisos con sus fans y hasta concederles los tan ansiados meet & greets; Black Sabbath y Judas Priest confirmaron su legado, Metallica regresó con todo y Pantera y los festivales nos hicieron vivir de nuevo.
En este 2022, Reino Unido y Europa se convirtieron en la capital del rock y el metal el verano pasado, toda aquella banda medianamente importante estuvo de regreso en los múltiples escenarios disponibles ya sea en sus propias giras o como parte de los line ups de decenas de festivales que ya fueron posibles este año. Atestiguamos la vuelta de los monstruosos festivales del rock y metal que habían suspendido sus ediciones hasta dos años consecutivos debido a la pandemia; entre ellos el Rock Am Ring, Download Fest, Graspop Metal Meeting, Hellfest y Wacken Open Air, entre varios más.
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También, los metalheads fueron testigos de grandes sucesos por los que habían esperado incluso décadas; uno de ellos, y de lo mejor del año sin duda alguna, fue la noticia del regreso Pantera; que aún con toda la controversia de si se trataba de una versión descafeinada debido a las ausencias de los hermanos Dimebag Darrell, Vinnie Paul y la llegada de refuerzos como Zakk Wylde y Charlie Benante. Aun con todas esas habladurías en contra y de que, en México se presentarían por primera vez desde hace más de dos décadas en un festival con antecedentes por demás conocidos como el Hell & Heaven, fue posible revivir los clásicos del cuarteto con Phil Anselmo y Rex Brown, para después seguir una serie de presentaciones en tres de los cinco Knotfest con sede en Latinoamérica.
Otro suceso que no debe dejarse pasar de este año es la gran huella que todavía es capaz de dejar Black Sabbath o sus integrantes; hace unos meses, Ozzy Osbourne y Tony Iommi fueron tendencia en redes sociales por un par de días luego de que ambos se reunieron en un escenario para un par de breves sets musicales especialmente para las ceremonias de inauguración y de clausura de los Commonwealth Games de Birmingham. Y aunque, sabemos que por cuestiones legales Black Sabbath no tiene oportunidades de resurgir, ver a ambas leyendas vivientes en el escenario haciendo lo suyo no es cosa menor. Además, hace apenas unas semanas, Osbourne estrenó su álbum “Patient Number 9”, el cual recibió tres nominaciones en los Premios Grammy, como Mejor Álbum Rock, Mejor Canción Rock y Mejor Performance Metal por la canción “Degradation Rules” precisamente con Tony Iommi; lo cual nos comprueba nuevamente la importancia y la influencia que aun mantienen en la escena metalera.
Un tema importante para Judas Priest sucedió finalmente este año; fueron inducidos en la clase 2022 al Rock & Roll Hall of Fame después de varias postulaciones; a estas alturas de la vida, literalmente no se entiende por qué una banda con la trascendencia, importancia, influencia y trayectoria de Judas no había tenido ese reconocimiento y por qué Rob Halford le había dado tanta importancia a conseguir este reconocimiento, pero para su fascinación, finalmente sucedió.
Y al parecer, la última gran bomba del año, fueron los anuncios de Metallica, de la fecha de lanzamiento de “72 Seasons” su nuevo álbum; la revelación de “Lux AEterna”, su primer sencillo; el estreno de su respectivo videoclip y la confirmación de que México está incluido en su “M72 World Tour” que se extenderá por 42 fechas en 23 ciudades durante 2023 y 2024.
Al inicio de este 2022, el año parecía ya darnos las primeras alegrías con los nuevos álbumes en puerta, los festivales y grandes conciertos de regreso y la disminución de las restricciones en general, lo cual finalmente fue sucediendo de a poco con el avance de año; pero todavía temprano en febrero la invasión rusa a Ucrania nos tomó desprevenidos en el mundo y aunque pareciera que los temas políticos son lejanos a los musicales, este tipo de sucesos resuenan en todos los ámbitos; este conflicto dio origen a varios actos benéficos principalmente de bandas y artistas ucranianos y provocó pronunciamientos de todo tipo en los músicos.
Esperemos que el próximo año, esté cargado de muchos más álbumes, muchas más giras, más conciertos, más festivales, más sencillos y mucha más certidumbre... 2023 ya te tenemos ganas.
Recuerden que la mejor música es la que se escucha ¡a todo volumen!
@Jenn_Ramirez_