Multa UE a tres fabricantes de chips para tarjetas de móviles por 130 mde
Samsung se benefició de una reducción del 30% en la multa por haber cooperado en la investigación.

La Comisión Europea impuso este miércoles una multa de 138 millones de euros a tres fabricantes de chips para las tarjetas que se usan en teléfonos móviles, bancarias o pasaportes por pactar precios entre 2003 y 2005.
La principal multa ha sido impuesta al alemán Infineon (82,8 millones), mientras el surcoreano Samsung recibió 35,1 millones de euros y el holandés 20,1 millones.
Estas tres empresas han sido reconocidas culpables de haber mantenido contactos bilaterales entre septiembre de 2003 y 2005 para acordar sus respuestas respectivas a los clientes que reclamaban reducción de precios. Estas prácticas son contrarias a las reglas de la UE que prohíben los acuerdos sobre precios.
Un cuarto participante en el cartel, Renesas, que en la época era una empresa común de los japoneses Hitachi y Mitsubishi, se benefició por haber revelado a la Comisión la existencia de un acuerdo, lo que le permitió evitar una multa de más de 51 millones de euros.
“En la era digital, casi todo el mundo utiliza chips para tarjetas, en el teléfono móvil, en la tarjeta bancaria o en el pasaporte”, dijo el comisario europeo encargado de la Competencia, Joaquín Almunia. “Si las empresas deciden concertar precios en detrimento de los clientes y los consumidores finales, se exponen a sanciones”, recordó.