La Presidencia de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México solicitó a la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Xantall Cuevas Nieves, garantizar la integridad de ciudadanos y representantes populares que realicen trabajo y gestión de atención a la ciudadanía en su demarcación, a fin de evitar la repetición de la violencia que denunció ayer la diputada por el PRI, Maxta Iraís González Carrillo.
La instancia legislativa representada por diputado Héctor Díaz-Polanco consideró “especialmente grave” que los agresores señalados por la congresista son funcionarios de la alcaldía Cuauhtémoc.
“Ningún ciudadano o funcionario público debe ser objeto de tratos violentos; ningún representante electo por voto popular debe ser agredido en el ejercicio de sus actividades de atención ciudadana”, señaló en un comunicado.
Asimismo, la Presidencia de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México expresó su rechazo y condena a toda agresión contra cualquier legislador integrante del Congreso capitalino.
Ayer la priista Maxta Iraís González instaló un módulo de gestión social en la colonia Obrera, hasta donde llegaron funcionarios de la alcaldía que, sin si quiera mostrar un oficio de por medio, retiraron una carpa donde la legisladora ofrecía abarrotes a bajo costo. La diputada denunció que durante estos hechos se registraron jaloneos, golpes e intimidación.