El Judas más solicitado previo al sábado de gloria es la figura del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. En el mercado de Sonora, ubicado en la delegación Venustiano Carranza, la venta de los tradicionales diablos quedó en segundo lugar, ya que la imagen del mandatario americano superó en ventas al también llamado lucifer.
La quema de los judas de cartón, con rostro de diablo, es una tradición que data de la época colonial y en la actualidad se juzga con la quema a los malos personajes, que han mostrado pésimo comportamiento social.
En Semana Santa, la destrucción de los llamados judas, representa el triunfo del bien sobre el mal, aunque este año, la figura más solicitada es la del republicano Donald Trump, cuyos precios van de los 150 hasta los 700 pesos, según el tamaño.
“El Trump está jalando muy bien, trajimos varios y ya se vendieron; ahorita voy a pintar más porque se está vendiendo mucho entre la gente por obvias razones y hay de diferentes precios, el más caro 600 u 800 pesos”, comentó Carmen, una vendedora.
Pese a que las ventas este año disminuyeron considerablemente, por razones económicas o por la problemática ambiental, la añeja tradición se resiste a morir, con una nueva figura que ahora es la más odiada.
“La tradición no ha muerto aunque los judas estén muy caros; este año sin duda el que se lleva el premio mayor es Trump, vamos a quemarlo aunque cueste un poco más caro que los diablitos”, afirmó Fernando Ramírez.
La amplitud del color rojo de los diablos es lo que más llama la atención, aunque también se ofertan brujas, calaveras, mariachis y charros.