En la Cámara de Diputados, con tres horas de retraso, arrancó la sesión ordinaria en el Pleno, durante la que se discutirá la iniciativa del Presidente de la República, en materia de Guardia Nacional y seguridad.
Al filo de las 20:00 horas, el líder parlamentario de la bancada de Morena, Ignacio Mier, subió a Tribuna a presentar el proyecto del Ejecutivo, adoptado de manera íntegra y textual por los integrantes de esa fracción.
Mier Velazco aseguró que el planteamiento no modifica el “espíritu” de la reforma que creó la Guardia Nacional, en 2019.
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Las modificaciones planteadas, subrayó, respetan el hecho de que la Guardia se creó como una corporación civil.
Los cambios planteados por el Ejecutivo Federal y que fueron asumidos íntegramente por los diputados morenistas, del Partido Verde (PVEM) y del Partido del Trabajo (PT), agregó el líder morenista, buscan dar certeza administrativa a los 113 mil integrantes de la Guardia.
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Recordó que el 80 por ciento de los miembros de la corporación ya están al servicio del orden castrense.
Mociones suspensivas
El coordinador parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC), Jorge Álvarez, coincidió con que el contenido de la iniciativa es similar a lo que la actual mayoría repudió del gobierno del entonces Presidente Felipe Calderón.
Sentenció que las fuerzas políticas en el Legislativo están ante la disyuntiva de estar del lado de la Constitución, o bien, de la traición a la patria.
“Hoy hay dos opciones que van a quedar en la historia: o se defiende a la Constitución o se está del lado de la Constitución o se traiciona a México. Lo que están haciendo es traición a la patria, porque impedir que este país inicie el camino de pacificación, perpetuar la guerra, perpetuar la estrategia fallida, darle la espalda a las víctimas es traicionar a la patria”, sentenció.
Demandó a los congresistas de la mayoría dar un solo argumento que justifique la urgencia de aprobar la propuesta.
Al personalizar el debate, dijo a un congresista de la mayoría, que él y sus compañeros se encontrarán próximamente donde hoy se encuentra el exsecretario de Seguridad, Genaro García Luna, aunado a que serán “traidores a la patria”.
En el intento de frenar la discusión del proyecto, integrantes del bloque de oposición presentaron mociones suspensivas que fueron rechazadas por la mayoría.
El diputado del PAN, Jorge Espadas, señaló que el procedimiento “fast track” en el procesamiento de la iniciativa, viola el derecho de los congresistas de legislar en comisiones, analizar a fondo la propuesta, aunado a que impide a la ciudadanía enterarse del contenido de la misma, a través de ejercicios de estudio como los parlamentos abiertos.
El planteamiento es inconstitucional y pretende “cargarle” al Ejército Mexicano el desastre en que tiene el Gobierno Federal la seguridad pública.
Añoranza de Felipe Calderón
Por su parte, el diputado del PRD, Marcelino Castañeda subrayó que el argumento de que las Fuerzas Armadas tienen la confianza de la ciudadanía, para justificar la entrega del control operativo y administrativo de la Guardia a la Secretaría de la Defensa (Sedena), podría ser válido, pero es insuficiente.
El legislador agregó que el fracaso de la estrategia de seguridad del Ejecutivo Federal, de “abrazos, no balazos” y la “admiración” del Primer Mandatario por las medidas implementadas en su momento por el panista Felipe Calderón, lo han llevado a proceder en términos similares.
La diputada del PRI, María de Jesús Aguirre advirtió, en otra moción suspensiva rechazada, que el procedimiento “fast track” a un tema tan delicado como el de la seguridad pública y las Fuerzas Armadas, no se justifica.