Ignacio Mendoza Gandaria, ex mando del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), no se presentó a la audiencia en la que sería imputado por los delitos de desaparición forzada y tortura relacionados con el caso Ayotzinapa.
La defensa del actual funcionario del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) argumentó que su cliente se contagió de Covid-19, motivo por el cual no se encuentra física y mentalmente en condiciones de comparecer por lo que solicitó diferir la diligencia.
Ante ello, el juez Felipe de Jesús Delgadillo Padierna dio un plazo de 48 horas para que la Fiscalía General de la República (FGR) verifique la documentación que presentó el ex servidor público para justificar su inasistencia.
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En caso de comprobarse que la información proporcionada al juez es falsa, la fiscalía estará en condiciones de solicitar una orden de aprehensión en contra de Mendoza Gandaria, quien presuntamente estuvo presente con Tomás Zerón, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), durante un interrogatorio en el que Felipe Rodríguez Salgado “El Cepillo”, supuesto integrante del grupo criminal Guerreros Unidos, fue torturado para confesar su participación en la agresión cometida contra los estudiantes normalistas de Ayotzinapa.