Las políticas públicas en materia de infraestructura deben asumir el un enfoque social y “transformador”, de atender las necesidades primarias de las comunidades y grupos poblacionales, no solo convertirse en un polo de desarrollo económico, plantearon integrantes del bloque mayoritario en la Cámara de Diputados.
El integrante de la bancada del Partido del Trabajo (PT), Reginaldo Sandoval y el coordinador de Morena en San Lázaro, Ignacio Mier, coincidieron en ello.
“Alejarnos del enfoque tradicional de infraestructura y transitar hacia una visión de infraestructura humanizada, respetuosa de los derechos humanos y del medio ambiente”, es el camino a seguir, dijo Sandoval Flores.
Identificar las prioridades para eliminar las brechas de desigualdad entre comunidades, así como pensar en las necesidades por atender en materia de caminos rurales, movilidad, servicios básicos, es el camino a seguir, abundó.
Erradicar “moches”
La estrategia del Ejecutivo Federal en obras de infraestructura y también en la política social, de entregar apoyos y recursos públicos en directo a comunidades, grupos poblacionales y beneficiarios, forma parte de las acciones para quitar los “moches” creados en gobiernos anteriores y desde el propio recinto parlamentario, aseveró el diputado Mier Velazco.
“Porque hay que quitarnos el chip de que el que decide es el director de obra. Si le quita uno al director de obra, al secretario de obra la posibilidad de que ellos definan el programa de inversión, les estamos quitando el moche también, esa es la neta. Si le da uno el dinero a la comunidad, ellos mismos se cuidan, ellos mismos se autorregulan”, apuntó.
Al participar en las actividades de la Semana Nacional de Infraestructura Transformadora, organizadas por la Comisión de Infraestructura del recinto parlamentario, los congresistas de la mayoría recalcaron que si bien las obras impulsadas por el Ejecutivo buscan generar crecimiento económico a gran escala, también pretenden detonar el desarrollo regional.
Ese es el propósito con el cual se están desarrollando los proyectos del Tren Maya, el Tren Transístmico, el Tren Interurbano México-Toluca, obras hídricas en la región de La Laguna, en Durango y otros planes, remarcaron.
También destacaron como un acierto en la política social, que el Gobierno Federal haya optado por la entrega de becas, pensiones y otros beneficios de manera directa a los grupos poblacionales seleccionados por sus condiciones de vulnerabilidad.
Con esas medidas, la presente administración inició el camino rumbo a la transformación de la vida de las personas más desfavorecidas, que si bien no es fácil, va por buen rumbo, aseveraron.