En la Cámara de Diputados, la integrante de la bancada del Morena, Patricia Armendáriz, presentó una iniciativa de reforma en materia de adquisiciones.
Lo anterior para atender las fallas y la desarticulación en el abasto de medicamentos en la presente administración.
La congresista propuso crear un Sistema de Control de Abasto de Medicamentos, SICAMED, para gestionar la planeación, demanda, adquisición, administración y distribución de insumos para salud de manera consolidada.
Objetivos del SICAMED
El planteamiento publicado en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara señala que las irregularidades en la materia, han sido provocadas por la deficiente o nula planeación y programación en las órdenes de adquisición presentadas por las instituciones de salud.
Se requiere dar uniformidad en los distintos procesos de la cadena de abasto, para hacer más eficiente su compra y distribución y con ello erradicar las fallas en el abasto, apunta.
Los objetivos son asegurar el abasto oportuno de medicamentos del sector salud creando un Sistema de Control de Abasto de Medicamentos, SICAMED, que rija los procesos de gestión de demanda, adquisición y distribución de insumos de salud.
Esa instancia formará parte del Sistema de Abasto Institucional, y operará bajo el marco normativo del IMSS.
El mecanismo centrará su operación en criterios de planeación de la demanda basados en la incidencia, la demografía, y el análisis histórico del uso de insumos médicos, dice.
Deberá estar diseñado para permitir la gestión en tiempo real de la cadena de abasto de insumos para la salud, el resguardo de documentos, la creación de reportes sobre las operaciones realizadas, así como la creación de algoritmos que permitan tomar decisiones expeditas con fundamento en información real.
Prevé que los hospitales carguen sus órdenes de medicamentos de acuerdo a una planeación adecuada, aunado a que deberán reportar el cumplimiento de entrega de pedidos.
La Secretaría de Hacienda se encargará de registrar los contratos, volúmenes requeridos así como los plazos de recepción de las compras; mientras que la Secretaría de Salud federal coordinará las solicitudes de insumos.
Esa dependencia se encargará de la distribución y administración de las compras en la materia, tomando como base el Sistema de Abasto Institucional (SAI) del IMSS.
El planteamiento añade que las compras de medicamentos no sólo participan las grandes empresas, sino también los micro, pequeños y medianos negocios.
Irregularidades en la compra de insumos para salud
La congresista identificó una serie de anomalías en el sistema de compras consolidadas, como las deficiencias en la entrega de insumos por parte de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos, Unops.
Dicho organismo no considera los requerimientos reales del país, aunado a que existen órdenes de adquisición duplicadas; y falta de criterios de homologación de documentos que garanticen la trazabilidad y la entrega eficiente y oportuna de los insumos.
A la lista de deficiencias, agrega el seguimiento anómalo en la distribución de los medicamentos adquiridos; así como procedimientos de entrega y almacenamiento complejos o burocráticos que entorpecen la entrega oportuna de las medicinas.
La propuesta recalca que la desarticulación en la planeación, organización y administración dificulta la distribución de los medicamentos e insumos médicos, a pesar de qué los mismos hayan sido debidamente adquiridos.
Crítica que en las compras señaladas sigan aplicando dos sistemas, el consolidado, y las adquisiciones por adjudicaciones directas previstas en la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos, y Servicios del Sector Público.
Agrega que la existencia de distintas instituciones del sector salud en los tres órdenes de gobierno, también provoca fragmentación presupuestaria que impacta negativamente en las compras de medicinas.
En consecuencia, refiere, es necesario buscar nuevos mecanismos que se apeguen a las medidas de austeridad y ahorro en la compra de medicamentos, pero que sean eficaces, eficientes, económicos, transparentes, honrados y cumplan con medidas de rendición de cuentas para el abasto institucional.
Dicha logística, abunda la propuesta, debe contemplar elementos como la conservación adecuada de los medicamentos, verificar su caducidad, evitar el almacenamiento en bodegas, priorizar la entrega a hospitales públicos de acuerdo a sus respectivas necesidades y las de los pacientes.