Los espacios públicos en los más de cien municipios intervenidos mediante el Programa de Mejoramiento Urbano (PMU), contribuyen a la prevención del delito y ofrecen lugares de sana convivencia, aseguró Román Meyer Falcón, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Precisó que el mejoramiento de espacios públicos representa un factor más para reducir la delincuencia, de la mano de políticas vinculadas al crecimiento económico y a un sistema de bienestar.
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Al clausurar la exposición "Arquitectura social, eje para la transformación del territorio", el funcionario dijo que la política territorial fue abandonada por más de tres décadas, por lo que esta administración retomó y fortaleció los trabajos para atender a las comunidades más desprotegidas a través del PMU.
Este, subrayó, también atiende el rezago habitacional, la regularización de la tenencia del suelo y la actualización de los instrumentos de planeación.
En el encuentro participó el secretario general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Saúl Parra Ibarra, quien refirió que la prevención del delito es atendida desde el entorno social mediante la participación de sociedad y gobierno.
Sin embargo, advirtió que persisten retos importantes como combatir la apatía y desconfianza de la población y el garantizar que todos los municipios cuenten con instrumentos de planeación actualizados para fortalecer el tejido social en las comunidades.
En su mensaje, Raymundo Pedro Morales Ángeles, director del Centro de Estudios Superiores Navales (Cesnav), señaló que gran porcentaje de los delitos ocurren en el espacio público, por lo que confirmó que para combatir la delincuencia de forma adecuada es necesario intervenirlos y junto a la sociedad, mantener presencia y control para su mantenimiento.
Finalmente, Antonio Alejandro Ramos Arg\u00fcello, titular de la subjefatura de planeación administrativa y logística de la Guardia Nacional (GN), comentó que la nueva realidad demanda espacios seguros con ambientes propicios para la integridad social, ya que la percepción de la inseguridad se detonó en los últimos años por los niveles de violencia o crimen y ha desincentivado a la población a salir de noche o permitir a los menores salir de casa.