El Protocolo Nacional de Atención a Niñas, Niños y Adolescentes en Condición de Orfandad por Feminicidio, tiene entre sus objetivos principales prevenir la revictimización de los hijos de algunas de las 10 mujeres que diariamente pierden la vida a causa de este delito en México y que eran madres, anunció Fabiola Alanís Sámano, Comisionada Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (CONAVIM).
Durante el evento para la presentación de los lineamientos para las víctimas indirectas de este delito, el cual se encuentra bajo la coordinación del Sistema Nacional DIF, liderado por María del Rocío García Pérez, Nadine Gasman, titular del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), explicó que a la llegada del actual gobierno federal, se conoció la inexistencia de un registro de los hijos de éstas víctimas que pudieron presenciar o incluso sufrir la violencia con la que fueron asesinadas sus madres.
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Piden perspectiva de género
Ahora se ha señalado a las autoridades federales y estatales, principalmente a los primeros respondientes que llegue a una escena del crimen con perspectiva de género, que den cuenta de manera inmediata de menores y adolescentes dependientes de la víctima "y que nunca más se les invisibilice".
Por ello es que las instituciones se dieron a la tarea de iniciar su reconocimiento oficial para poder atender sus necesidades, protegerlos y garantizar sus derechos.
Integrarán a huérfanos
Cómo parte de este objetivo, se ha enviado ya un primer registro a la Secretaría de Bienestar para que se les integre a la Beca Benito Juárez.
Por su parte, la Fiscal de Justicia de la Ciudad de México, Ernestina Godoy Ramos, enfatizó que muchos de estos menores y adolescentes fueron testigos o víctimas de la agresión en la que perdieron la vida sus madres, por ello dijo, es obligación del estado y la sociedad, otorgarles los elementos necesarios para que recuperen el proyecto de vida que estas hubieran querido para ellos.
Solo tres estados contaban con programas
Previo a este protocolo nacional, solo la Ciudad de México, Coahuila y Jalisco contaban con programas estatales de atención a las Niñas, Niños y adolescentes víctimas indirectas de este delito.
Finalmente la titular del DIF Nacional, García Pérez, subrayó que este protocolo contiene una ruta detallada para resguardarlos y restituir sus derechos y que las consecuencias de este delito sean atendidas y se garantice la protección integral de los menores a través de atención psicológica, resguardo, seguridad, alimentación, salud e incluso acompañamiento en el duelo.