Acusan espionaje para detener a activista en Edomex

El Centro de Derechos Humanos que la FGJ-Edomex, utilizó un reporte elaborado “ilegalmente” por Conmex donde se detalla el perfil personal y político de la activista, el cual además ha sido incluido como dato de prueba.

Activista social, Kenia Hernández / Quadratín Guerrero
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El Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero, acusó al gobierno del Estado de México de utilizar sistemas y métodos de espionaje en contra de la activista y luchadora social Kenia Hernández para su detención.

La fundadora e integrante del Colectivo Zapata Vive y del Movimiento por la Liberación de los Presos Políticos de Guerrero, se encuentra detenida en el penal de Chiconautla, Estado de México, acusada de robar una cartera con 500 pesos a dos personas por parte de la empresa Concesionaria Mexiquense (Conmex).

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El Centro de Derechos Humanos, quien ha asumido la defensa legal de la activista que se encuentra protegida por el Mecanismo para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas a causa de diversas amenazas de muerte en su contra, explicó que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, utilizó un reporte elaborado "ilegalmente" por Conmex donde se detalla el perfil personal y político de la activista, el cual además ha sido incluido como dato de prueba.

Este documento incluye nombre completo de la activista, municipio de origen, estado de residencia, domicilio, fecha de nacimiento, edad, RFC, CURP, cédula profesional, además de una lista de los vínculos de la activista con movimientos y organizaciones sociales, afinidad política, antecedentes políticos y otros dato.

Kenia Hernández se encuentra actualmente privada de la libertad en el Penal de Chiconautla, Estado de México, en espera de audiencia para determinar su situación jurídica, tras haber sido detenida el sábado 6 de junio acusada de haber cometido el robo con violencia de una cartera con 500 pesos a dos personas que iban a bordo de una camioneta el pasado 19 de marzo.

Otras irregularidades que se registran en el proceso penal contra la luchadora, señala su defensa, incluyen que no se presentó orden de aprehensión en el momento de la detención; que el proceso de reconocimiento facial por parte de las personas que le acusan de robo tuvo irregularidades, y que no existen pruebas de que Kenia estuviera presente en el lugar y tiempo en que supuestamente ocurrieron los hechos.