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Con su proyecto #AlertaPrensa, Reporteros sin Fronteras (RSF) y la organización Propuesta Cívica (socia de RSF), reclaman que entre enero y mayo de 2018, 45 periodistas mexicanos y 4 medios de comunicación han sido atacados por su cobertura de las elecciones.
En los primeros cinco meses del año 45 periodistas fueron víctimas de amenazas verbales, escritas o en línea; violencia física; campañas de difamación o de desprestigio; y acoso judicial. De ellos 16 víctimas eran mujeres periodistas; 4 medios de comunicación fueron atacados.
Cinco periodistas han perdido la vida en lo que va del 2018, en un entorno donde los políticos también son víctimas de esta violencia: de septiembre de 2017 al cierre de este balance, al menos 112 candidatos y precandidatos han sido asesinados en México.
“RSF hace un llamado urgente a los políticos y a las autoridades –tanto federales como locales– a prevenir situaciones de mayor riesgo y a fortalecer o crear dispositivos de protección adecuados para las y los periodistas que cubren el proceso electoral ”, señaló Emmanuel Colombié, director del Despacho América Latina de RSF; también llamó a los medios a proteger a sus reporteros y a las autoridades a cumplir con su trabajo.
Reporteros Sin Fronteras y Propuesta Cívica informaron que la Ciudad de México (CDMX), Puebla y Morelos son los estados donde han ocurrido el mayor número de agresiones –si bien estas entidades no se encuentran entre las más violentas para la prensa en el país.
En otras regiones de México afectadas por la violencia del crimen organizado, como los estados de Tamaulipas, Veracruz y Guerrero, también ocurren este tipo de agresiones, pero en estas zonas los periodistas –que a menudo se ven obligados autocensurarse– no denuncian estas situaciones por temor a represalias, lo que generado que existan zonas grises donde ya no circula la información.
En la mayoría de los ataques, son señalados cómo posibles agresores “candidatos a alcalde, gobernador o senador”.
El constante aumento de las agresiones ante la cercanía de los comicios; el perfil de los periodistas víctimas: reporteros y columnistas; y la falta de dispositivos de protección eficaces para quienes realizan este tipo de cobertura periodística, aumentan “un clima de desconfianza e inseguridad insostenible para los periodistas mexicanos, que de por sí se enfrentan a un grado de violencia sin precedentes en Occidente”.
En todos los casos registrados por el proyecto Alerta Prensa, los reporteros enviados a cubrir el proceso electoral y a desplazarse con los equipos de campaña –en ocasiones en regiones peligrosas– no contaban con medidas de seguridad específicas ni habían recibido capacitación para realizar este tipo de trabajo, de modo que en caso de agresión o ataque sepan qué hacer o a quién pedir ayuda, detallan.
La cifra “es alarmante y muestran la situación que enfrenta el gremio periodístico, debilitado y agredido por los políticos, y cómo las agresiones se multiplican a medida que se acerca la votación”, finalizan Reporteros Sin Fronteras y Propuesta Cívica.
México se prepara para vivir uno de los procesos electorales más importantes de su historia reciente. El 1 de julio de 2018 los ciudadanos votarán para elegir a quienes ocuparán 3,406 puestos públicos: Presidente de la República, senadores, diputados federales y gobernadores de 9 de los 32 estados del país. RSF y la organización Propuesta Cívica (socia de RSF en México), crearon una plataforma de monitoreo para registrar las agresiones a periodistas y a medios de comunicación en el contexto electoral.
El proyecto, llamado Alerta Prensa (#AlertaPrensa), analiza la situación en cada región, así como el tipo de agresiones; lo hizo en 2012 y lo hace ahora en 2018.