Se quejan defensores ante ONU y CNDH por acciones deficientes ante obesidad infantil

La infancia mexicana sigue expuesta a la publicidad de alimentos y bebidas no saludables a través de diversos medios, dijo Javier Zúñiga, coordinador del área jurídica en El Poder del Consumidor.

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El Poder del Consumidor (EPC), en el marco del Día del Niño, presentó una nueva queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) así como un Reporte Sombra ante la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en contra de las autoridades mexicanas que no han garantizado el derecho a la salud a los infantes que presentan el mayor índice de sobrepeso y obesidad a escala global.

En el Registro Nacional de Peso y Talla 2016 en escuelas, cuando los alumnos entran a primero de primaria, el 26% tiene sobrepeso u obesidad, pero el número aumenta hasta el 39% cuando llegan a quinto grado. Este aumento está relacionado con la existencia de un ambiente “obesogénico” donde escolares se encuentran expuestos a una alta disponibilidad de alimentos y bebidas no saludables, además de una persistente publicidad y ausencia de información que les permita realizar elecciones saludables al momento de consumir alimentos.

En 2010, 2012 y 2016, El Poder del Consumidor presentó diversas quejas ante la CNDH por una ausencia de regulación para un combate eficaz contra la obesidad y el sobrepeso; incluso, las normas vigentes no eran suficientes.

La propia Secretaría de Salud, a finales de 2016, declaró la emergencia epidemiológica por diabetes y sobrepeso, en la que se resaltaba los efectos que tenía esta enfermedad en los menores de edad mexicanos.

Ahora, El Poder del Consumidor presenta una nueva queja ante la CNDH focalizada en los infantes mexicanos, por la violación del Estado a los derechos a la salud y a la alimentación de la infancia mexicana.

Fiorella Espinosa, investigadora en salud alimentaria en El Poder del Consumidor resaltó que la regulación de la oferta de alimentos y bebidas y acceso al agua potable para beber en las escuelas es “deficiente”.

Javier Zúñiga, coordinador del área jurídica en El Poder del Consumidor, señaló que la infancia mexicana sigue expuesta a la publicidad de alimentos y bebidas no saludables a través de diversos medios, pues no prohíbe la publicidad en los horarios y programas de televisión más vistos por los niños (de 20 a 22 hrs. y telenovelas respectivamente), ni tampoco en internet, los empaques o en espacios públicos.

En el caso de escuelas es aún más grave, pues, aunque ya existen lineamientos obligatorios y sancionables para la venta de comida y bebidas en las escuelas desde el año 2014, tanto la falta de acciones de sensibilización y capacitación a la comunidad escolar permite que los alumnos sigan expuestos a oferta de alimentos no saludables. 

Por último, en el caso del etiquetado nutrimental que está al frente de los empaques de alimentos y bebidas industrializados, no puede ser entendido ni siquiera por los adultos, mucho menos lo es para los niños, finaliza.