Luego de que este 8 de mayo, el papa León XIV fuera presentado al mundo como el nuevo líder de la Iglesia Católica, la organización SNAP (Survivors Network of those Abused by Priests) lo acusó públicamente de haber encubierto casos de abusos sexuales durante su etapa como líder eclesiástico en Perú.
Apenas unas horas después de su primera aparición pública como pontífice, SNAP emitió un comunicado señalando que León XIV no protegió a las víctimas ni tomó medidas contra los agresores.
Salen a la luz acusaciones desde Perú y Estados Unidos
De acuerdo con SNAP, durante su etapa como provincial de los agustinos en América Latina, Robert Prevost permitió que un sacerdote acusado de abusar de menores residiera en el convento agustino St. John Stone, en Chicago, en el año 2000. Lo preocupante, según la organización, es que este convento estaba adyacente a una escuela primaria católica, a pesar de que el sacerdote tenía restricciones pastorales desde 1991.
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Además, como obispo de Chiclayo, Perú, entre 2015 y 2023, SNAP afirma que León XIV fue informado en 2022 sobre denuncias civiles contra un sacerdote local. Sin embargo, según la organización, no abrió una investigación interna ni tomó medidas preventivas.
“Las víctimas aseguran que Prevost no actuó. Tenemos fotografías del sacerdote oficiando misa tras la denuncia como evidencia de esta inacción”, detalla el comunicado.
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¿Qué pide SNAP a León XIV?
El grupo presentó una denuncia formal contra León XIV el 25 de marzo de 2025, amparándose en el decreto Vos estis lux mundi, promulgado por el papa Francisco. Este documento establece directrices canónicas para abordar los abusos sexuales.
SNAP solicita al pontífice que, en sus primeros 100 días, implemente reformas como:
• La creación de una Comisión Global de la Verdad con acceso irrestricto a archivos eclesiásticos.
• La promulgación de una política universal de tolerancia cero en el derecho canónico.
• La creación de un Fondo de Reparaciones financiado por activos de la Iglesia.
• Acuerdos internacionales para asegurar la rendición de cuentas.
Mientras algunos fieles esperan un liderazgo renovador, las acusaciones de SNAP plantean un desafío crítico para León XIV. Su respuesta ante estas denuncias será clave para demostrar su compromiso con la transparencia y la justicia en una Iglesia que enfrenta retos históricos.
Con información de EFE.