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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Andrea Sáenz-Arroyo, profesora investigadora del Colegio de la Frontera Sur nos habló de su libro “Un mar de esperanza, soluciones ciudadanas para un planeta sostenible”.
Detalló que se habla de que comunidades pequeñas desarrollan una inteligencia ambiental, una inteligencia ecológica, lo que hace que la escritora se pregunte por qué en las ciudades, ¿no?
“¿Son inteligentes psicológicamente porque son chiquitos o porque son indígenas? No. Pues ahí está un ejemplo de la sociedad californiana que defendiendo su derecho de ver el mar en la costa de Galicia y aplicó una maricultura inteligente. Países como Dinamarca, Islandia, ¿entonces?”
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Ante ello explicó que hay que fijarnos en estas historias y replicarlas “pues nos permite apostar por ganar la batalla” por el cuidado del planeta.
“Estamos todos ante un tren que va al abismo a toda velocidad y que ese es esta globalización, en donde las rentas se basan en bajar leyes ambientales. Si tú quieres atraer capital, no hay una manera más fácil de hacerlo que poner leyes ambientales laxas”.
Detalló que en México deberíamos de estar muy atentos y copiar estos manejos ambientales que “no solo se dan en pequeñas comunidades y que no emergieron como palomitas”.