Una de las personalidades más emblemáticas y representativas del metal en las últimas décadas sin duda es Ozzy Osbourne, quien recientemente dijo que "adorar al diablo" podría ser una razón por la que no se ha contagiado de Covid-19.
Sí, así como lo lees, pues no por nada es conocido como el "Príncipe de las Tinieblas", que también es mundialmente conocido por haber estado al frente de la legendaria banda de heavy metal, Black Sabbath.
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Sin embargo, ante el coronavirus, muchos artistas han manifestado si creen o no en la enfermedad, así como el por qué a lo largo de la pandemia todavía no se contagian.
Tal es el caso del compositor que, en una reciente entrevista con Metal Hammer expuso sus razones por las que su familia, específicamente su esposa, Sharon Osbourne y una de sus hijas, ya contrajeron el virus y él no.
En ese sentido, de forma irónica aseguró que ser un "fiel" seguidor de Satanás lo ha protegido del SARS-CoV-2.
"Mi esposa tenía el virus, mi hija tenía el virus, y yo, nunca lo contraje. ¡Ser un adorador del diablo tiene sus ventajas!".
Cabe mencionar que dicha declaración solo se trataba de una broma por parte del británico de 72 años, de acuerdo con el artículo publicado en el medio citado.
Estado de salud de Ozzy Osbourne
No obstante, en los últimos meses, el estado de salud del intérprete de "Paranoid" y "Iron Man" se ha visto deteriorado, tanto que en algún momento corrió el rumor acerca de que estaría en su "lecho de muerte".
Situación que fue desmentida a los medios de comunicación, y en septiembre pasado, Sharon Osbourne dio una actualización de la evolución de su esposo.
Recordemos que el cantante sufre complicaciones en su cuello y espalda tras una fuerte caída que tuvo en el 2019.
Por tal motivo, la esposa del "Príncipe de las Tinieblas" explicó al Daily Mail que se programó una cirugía mayor, aunque no especificó cuando, para tratar las lesiones que el legendario compositor presenta.
Y es que, esos padecimientos han complicado que se mantenga activo en su carrera musical, sobre todo, arriba de los escenarios.
Poco tiempo después del accidente, diagnosticaron a Ozzy Osbourne con Parkinson, enfermedad de la cual se mantiene estable.