La Liga MX promete eliminar el grito homofóbico en las tribunas y ser contundente en las medidas para erradicarlo entre los aficionados durante los partidos, anunció Mikel Arriola.
“El grito afecta a la raíz del fútbol mexicano. Si no lo atendemos, va a afectar a las selecciones nacionales. Nuestra posición es de contundencia, de incrementar los esfuerzos para que no se de”, manifestó Arriola.
La federación ha debido pagar cuantiosas multas por el grito homofóbico en las tribunas que los aficionados dedican a los porteros de los equipos rivales.
El Tri llegó incluso a jugar dos partidos sin público y hasta recibió anuncios sobre la posibilidad de quedar por fuera del Mundial de Catar y hasta perder la sede del torneo de 2026.
“Vamos a seguir con los protocolos en los partidos de la Liga MX, la de expansión y la femenina y mantendremos la capacidad de prevención y reacción”, agregó.
El pasado sábado, durante el debut de México en la Copa Oro frente a Trinidad y Tobago en Arlington (Texas), el árbitro interrumpió dos veces el partido por el grito homofóbico en las tribunas en contra de los rivales.
Dónde se originó el grito homofóbico
Lo que se consideraba un simple momento diversión, pasó a ser una característica de los aficionados de la Liga MX, hasta llegar a calificarse como un grito homofóbico.
Durante los últimos años la FIFA ha aplicado fuertes multas a la Federación Mexicana de Futbol. Ninguna ha ayudado a que no se escuche más el "eh puto".
Durante el Clásico Tapatío del 2003 se escuchó por primera vez
La Barra 51 le gritó especialmente a Oswaldo Sánchez pues estaban enojados porque confesó que estaba agradecido con Atlas por haberle dado la oportunidad de debutar en Primera División, pero su corazón era de Chivas.
De ahí pasó a niveles internacionales. La Selección Mexicana enfrentó a Estados Unidos en 2004 durante el Preolímpico para los Juegos de Atenas.
En dicho partido que se jugó en el Estadio Jalisco, también se escuchó el grito homofóbico en las tribunas, en contra del rival en varias ocasiones.